En la clausura de la VII Conferencia Latinoamericana y Caribeña (Clacso) desarrollada la semana pasada en Medellín, uno de los invitados especiales, para dar la conferencia final fue Baltasar Garzón, juez, abogado, y presidente del Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos (CIPDH) bajo auspicio de la UNESCO y de la Fundación Internacional Baltasar Garzón, pro Derechos Humanos y jurisdicción universal.
Durante 33 minutos este académico habló sobre los derechos humanos, la paz y la justicia de América Latina. Por ejemplo para él la paz es humana o no lo es, «todos y todas tenemos derecho a la paz, y los derechos humanos constituyen un todo imprescindible cuyo destinatario son los seremos vivos, y Suramérica ha tomado la iniciativa monumental en ese aspecto, especialmente Colombia con los diálogos con las FARC», expresó.
Agregó que la paz solo puede existir en circunstancias en que los DD.HH sean respetados, promocionados y defendidos y ese es el reto de la región, pues según Garzón llevamos 200 viviendo y no los conocemos.
Proceso de paz
Baltasar Garzón dice que el proceso de paz en La Habana tiene que ser con un solo lenguaje, y así desembocar en un acuerdo mutuo. Además asegura que los habitantes del país están divididos en favor de la paz, determinada por una trampa que algunos establecen en los medios de comunicación, quienes según él, desinforman en vez de informar.
«En América Latina vivimos en un momento donde se tienen que comprender los DD.HH. Es una necesidad, por encima de la tipificación. De hecho la democracia ya no es un espectáculo de cada 4 años, sino un proceso proactivo en el proceso de elección popular», explicó este español.
Para Garzón la única forma de erradicar la violencia, es con la transparencia y mucho más en un mundo actual donde los valores ciudadanos representan el núcleo fundamental para decidir el camino de paz, pero se ha avanzado con cambios revolucionarios.
Retos
En el proceso de paz del Gobierno con las FARC, Garzón cree que hay una población que no quisiera que termine la guerra nunca, porque manejan intereses ocultos, económicos, sociales y políticos.
«Puede parecer una barbaridad pero hay quien vive mucho mejor con una violencia definida que con una lucha efectiva contra ella», afirmó a la vez que dijo que la seguridad y la justicia son dos verbos que deben de conjugarse al mismo tiempo, pero la seguridad jurídica, es la certeza de que los mecanismos de justicia van a beneficiar a los ciudadanos.
Asimismo, «los fiscales tienen que transmitir la confianza que necesitan los colombianos, y si no se establece transparencia, la justicia será para los más pobres, y no para los que más tienen», enfatizó.
Para Garzón la educación tiene que integrar a los DD.HH con la paz. «Se debe pasar de una transición política a una transición social. Una paz justa, no de justicia de paz, sino en un contexto donde se establezcan de una forma obligatoria. Los jóvenes tienen un papel fundamental porque tienen que construir un futuro», finalizó.
