Continúan agresiones a reclamantes de Guacamayas

Comunicado Público

Medellín, 30 de junio de 2016

Nuevamente hombres desconocidos ingresaron en la vereda Guacamayas del municipio de Turbo  y destruyeron la casa de un campesino reclamante de tierras.

Los hechos ocurrieron el pasado 28 de junio cuando cuatro campesinos de Urabá informaron que a las tres de la tarde entró una camioneta al predio del señor Adriano Correa, de ella salieron dos mujeres que los abordaron con una oferta de medicina naturista. A los pocos minutos, los campesinos se percataron de que estas mujeres  buscan distraerlos para que, por otro lado del predio, ingresara un grupo de hombres a tumbar las viviendas de los reclamantes.

Debido a la reacción de los campesinos, finalmente el grupo de hombres solo ocasionó destrozos en una vivienda, perteneciente al campesino Tito David. Aunque la fuerza pública acudió al lugar, no alcanzó a reaccionar debido a la sorpresa del ataque.

Hacemos un llamado a que se refuerce la protección a estas comunidades por parte de la Fuerza Pública y a que se presenten las respectivas investigaciones por parte de la Fiscalía General de la Nación para establecer quienes son los responsables materiales e intelectuales de estos hechos revictimizantes contra los campesinos reclamantes de tierras.

En varias ocasiones, la Defensoría del Pueblo ha expedido oficios alertando sobre los riesgos y vulnerabilidad extrema de estas comunidades, y sobre la necesidad de mantener y reforzar la presencia de la Fuerza Pública.

Las agresiones ocurridas hasta ahora han sido puestas en conocimiento del Gobierno Nacional, a través del Ministerio del Interior, que ha atendido el llamado de los campesinos reclamantes de tierras y de las organizaciones acompañantes, y ha ordenado medidas de atención, investigación y prevención buscando proteger a las víctimas.

A sí mismo, organismos internacionales vienen haciendo seguimiento permanente a las agresiones sistemáticas que ocurren tanto en Urabá como en otras zonas del país, contra las víctimas reclamantes de tierras.

De igual forma, por diversos medios de comunicación se han hecho las alertas sobre el hostigamiento a los campesinos reclamantes de tierra de los corregimientos de Macondo y Blanquicet del municipio de Turbo, siendo en total 29 textos en los cuales se narran las afectaciones y los problemas que se presentan en el territorio.

Cuando avanzan en Colombia negociaciones de paz con la insurgencia, desde donde se solicita el desmonte del paramilitarismo y la vez se hacen propuestas de desarrollo rural integral, y cuando desde diferentes sectores sociales se habla del fin de la guerra en Colombia, resulta alarmante que la problemática con la restitución de tierras se continúe profundizando, y que algunos sectores sigan usando la violencia para impedir la devolución de predios y la reparación a las víctimas. Construir la paz en los territorios implica que no se revictimice a las comunidades que vienen pidiendo garantías y reclamando sus derechos.

Fundación Forjando Futuros

Asociación de reclamantes Tierra y Paz

Instituto Popular de Capacitación  —IPC