Candidatos de Nechí ven con esperanza el posconflicto

De izquierda a derecha: Daniel Castellanos, subgerente de la firma Cifras & Conceptos; Miguel Enrique Franco, Francisco Arrieta, José Camilo Echeverry (candidatos) y Gerardo Cardona de la Escuela de Gobierno de la UdeA.

Por Robert Nieto, director de Región al Día, para Agencia de Prensa IPC

Para Miguel Enrique Franco, candidato a la Alcaldía de Nechí, “muchos esperan que el posconflicto (…) genere procesos: Paz”. Para que esto se haga una realidad,  según él, “se necesita ser altamente proactivos y gestores de toda esa dinámica que se va a generar en ese marco conceptual y jurídico para [que] sea de mejor provecho para esta comunidad”.

Este comentario fue parte de la respuesta a una pregunta que se planteó a los candidatos a la alcaldía de Nechí sobre ¿cómo pensaba el futuro alcalde manejar el problema de las víctimas del conflicto armado? Y cuando se analiza el tema de la paz y el posconflicto, Nechí tiene mucho que ver con esto, pues en este municipio hay unas 7 mil víctimas del conflicto armado que se ha vivido durante varias décadas en este sector del país.

Sin embargo, la mayoría de los candidatos se centraron en las problemáticas más puntuales de la comunidad nechiana durante el foro realizado en el coliseo de ese municipio, al cual asistieron unas 200 personas el 23 de septiembre pasado. En este estuvieron presentes los candidatos Francisco Arrieta, Camilo Echeverry y Miguel Enrique Franco, tres de los 6 que están inscritos ante la Registraduría Nacional del Estado Civil.

Ellos coincidieron que hay algunas problemáticas que tienen en el municipio como son la pobreza, la descomposición social y el desempleo, por eso ven con buenos ojos el posconflicto. Sin embargo, fue después de culminado el foro que dos de ellos se expresaron más ampliamente sobre este tema.

El programa de Gobierno de José Camilo Echeverri Díaz se llama “Nechí en Paz”, y él le apuesta a la inversión social en el posconflicto. Según él, “esperamos tener toda la voluntad y la iniciativa para que cada uno de estos proyectos que se van a ejecutar, especialmente en la zona rural tengan un feliz cumplimiento. Estoy muy receptivo a todo el tema del posconflicto, proyectos productivos que se van a desarrollar desde el gobierno nacional. El posconflicto traerá una verdadera paz cuando el campesino tenga la capacidad de producir, de comercializar sus productos agropecuarios, esto es lo que traerá la verdadera paz para Colombia y en especial para el municipio de Nechí”.

Para él, su programa de Gobierno está muy vinculado a la paz y al posconflicto, pues tiene que ver con el desarrollo agropecuario. “Es imprescindible, nuestro eslogan es: Nechí en paz, gestión de todos, desde aquí está muy vinculado al posconflicto”.

Para Francisco Arrieta Franco, del partido de la U, el posconflicto es un medio para alcanzar unos objetivos. “El posconflicto se ha convertido -cuenta él- en la herramienta fundamental para que podamos desarrollar proyectos que se puedan trabajar de una manera integral para que podamos lograr una paz duradera”.

Para él, “el posconflicto es la reunión de toda la representación política de la parte pública que brinda las herramientas para que el campesino tenga la posibilidad de poner a producir tierra; a los jóvenes, acceder a una educación para alejarse del conflicto y, a las mujeres cabezas de familia, que puedan desarrollar proyectos productivos y la generación de ingresos”.

En otras palabras, más allá de un concepto jurídico, la paz se construye desde sus bases, “si queremos que haya paz es fundamental que conlleven a la  generación de empleo, que deben trabajar desde los campesinos, la competitividad, la innovación; se tiene que trabajar desde la generación de empleo.” Y concluyó que “los programas de Gobierno son herramientas de orden social, y en la medida que podamos fortalecer lo social, desde la infraestructura, mejoramiento educativo, vías terciarias, desarrollo productivo, generación de empleo y de ingresos estamos coadyudando a la paz”.